miércoles, 1 de octubre de 2014

Cosmos.



No me digas que esta noche es otra noche,
y que no está bailando el viento.
Que el universo no gira en llamas,
"Desde aquí no pueden vernos."

No me digas que esta noche es otra noche,
y que se está perdiendo en sueños.
Que olvidarás el levitar, el verso,
las melodías y el cantar, sin aliento.

No existirá otro cosmos como el tuyo,
De la luz eterna al negro eléctrico.

[...]

No me digas que esta noche es otra noche,
aunque esté amaneciendo.



Septiembre.



En la noche de la media luna y las flores malvas, regresó el eco del corazón exhausto.
Que tras viajar tanteando cada paso extraño, escribió su epílogo silente, en pedazos.

"Me dejé llevar por el presente y el latido."

Y tan profundo fue el rasgar de la plata en el pecho,
que cada sueño le huele a sangre y las lagrimas a acero negro.